He elegido este libro porque desde pequeña me
lo contaba mi padre y lo recuerdo con mucho cariño. A parte de esto, me parece muy adecuado para los alumnos de primero y segundo de
primaria, ya que enseña una serie de valores que los alumnos pueden adaptar en
su vida diaria, pudiendo ser introducido en el aula para la enseñanza de
valores cívicos y sociales o directamente para utilizarlo como un texto para la
comprensión lectora ya que el lenguaje empleado es muy asequible para estas
primeras edades.
María Eulalia Valeri
María Eulalia Valeri
La escritora, María Eulalia Valeri, nació en Barcelona el 14 de marzo de año 1936, poco antes de estallar la Guerra Civil Española. Estudió magisterio en la Universidad de Barcelona y se ha desarrollado como maestra, pero también como bibliotecaria y como escritora se especializó en libros para niños. Ha colaborado en obras colectivas destinadas
a la educación básica y ha traducido y adaptado cuentos para la escuela.
Ficha bibliográfica:
Título: El pequeño abeto
Autor: M. Eulalia Valeri
Ilustrador: Montserrat Brucart
Editorial: laGalera
Fecha 1ªedición: 1986
Edad en la que me baso para realizar este
análisis: 6-7 años
FORMATO
Es un libro manejable, pesa poco; sólo tiene
24 páginas, por lo tanto es ligero para cualquier niño de primaria. La portada
es atractiva, llama la atención a los alumnos, ya que a estas edades se fijan
mucho en las ilustraciones para imaginarse lo que están leyendo, además de
esto, son muy flexibles, lo que ayuda al niño a transportarlo y leerlo.
La tipografía es adecuada para primer ciclo de primaria, es cursiva, por
lo tanto más fácil de leer para ellos debido a que la lectoescritura comienza
con este tipo de letra. El tamaño, disminuye con respecto a niveles anteriores,
por lo cual pasa a ser el adecuado para esta edad. Los textos son cortos, por
eso está dedicado a los niños de 6 y 7 años que aún no han aprendido a leer
fluido textos grandes.
CONTENIDO
El pequeño abeto estaba triste porque quería
tener las hojas más bonitas, ya que los demás árboles eran mejores que él.
Quería las hojas de oro, le concedieron el deseo, pero por la noche un ladrón
se las robó. Quería las hojas de cristal, las tuvo, pero por la noche el fuerte
viento se las tiró todas. Después quiso tener las hojas grandes y verdes, y así
fue, pero al día siguiente unas cabras se las comieron. El pobre abeto se quedó
desnudo y paso mucho frío, entonces se dio cuenta de que sus hojas fuertes y
puntiagudas de abeto le resguardaban y protegían, así que las pidió y por la
mañana ya tenía otra vez sus hojas y creció hasta conseguir ser un abeto grande
y alto.
El tema principal del libro es el deseo de
ser diferente, sentimiento que surge también en los niños de estas edades, que
en muchas ocasiones buscan ser los mejores porque no se gustan a sí mismos.
En este caso, los temas secundarios son, la
diferencia entre seres y la belleza de los distintos materiales. El abeto
quiere ser de cristal, de oro y de hojas grandes, verdes y preciosas para ser
más bonito que los demás árboles.
La estructura es lineal, ya que tiene
planteamiento, nudo y desenlace.
El planteamiento es que el pequeño abeto está
triste porque no le gustan sus hojas puntiagudas y fuertes, quiere ser
diferente, más bonito que los otros árboles.
El nudo es la búsqueda de las hojas con las
que quiere sentirse feliz y cómodo.
El desenlace es el momento en el que reconoce
que tal y como él era es feliz y se encuentra a gusto y así se hace grande y
alto.
El personaje es el pequeño abeto, un arbolito
inseguro que desea ser como los demás árboles o incluso mejor. Es un poco
indeciso, ya que no sabe lo que quiere, todas las hojas que pide son muy
bonitas pero poco resistentes.
En mi opinión este personaje es adecuado para
los niños de 6 y 7 años, éstos se pueden identificar perfectamente con él ya
que con estas edades los alumnos son inseguros y muchas veces buscan ser
mejores que los demás.
Los personajes secundarios son, el ladrón,
que le roba las hojas de oro al abeto, el fuerte viento, que le rompe todas las
hojas de cristal y las cabritillas que se comen sus verdes, grandes y preciosas
hojas. Roles que conocen ya los niños a estas edades.
Los valores que tiene el pequeño abeto es que
es de ideas firmes, quiere unas hojas más bonitas y estar a gusto consigo mismo,
la aceptación. Los contravalores son la envidia, la frustración… contravalores
que los niños no sabrían identificar como tal, pero si tener una ligera idea de
por qué el abeto quiere tener unas hojas que no son las suyas.
El lenguaje que se emplea en este libro es adecuado
para los lectores de primero y segundo de primaria porque es una lectura
sencilla y ligera como ya he comentado anteriormente. Al tener poco texto, las
oraciones son muy sencillas y también rompe la monotonía del narrador
introduciendo frases que enuncia el propio protagonista.
El vocabulario es sencillo, tierno, los
lectores pueden entender perfectamente las expresiones.
CONCLUSIÓN
Como conclusión, utilizaría este cuento en el
aula de primero y segundo de primaria, ya que me parece muy adecuado para los
alumnos de estas edades, porque se puede tratar el tema del amor propio en
clase, intentar que entiendan que deben quererse tal y como son, sin desear tener
mejor aspecto que los demás, porque cada uno es único.
Asimismo, plantearía una pregunta a los alumnos,
¿qué nos hace diferentes de los demás? Y debatir en clase haciendo que vean así
sus cualidades y el por qué deben quererse a ellos mismos.